Asesinan a líder limonero que denunciaba extorsiones en Apatzingán
Apatzingán, Mich. 20 de Octubre del 2025. La catedral de Apatzingán se llenó de dolor y solemnidad este lunes durante la misa de cuerpo presente de Bernardo Bravo Manríquez, presidente de la Asociación de Citricultores del Valle de Apatzingán, quien fue asesinado horas antes con un disparo en la cabeza mientras viajaba en su camioneta. Cientos de personas acompañaron el féretro de color café que llegó pasadas las 18:00 horas, en una muestra del profundo impacto que su muerte causó en la comunidad. Las campanas de la iglesia repicaron anunciando el luto mientras productores, cortadores, empresarios y religiosos despedían al hombre que dedicó su vida al sector limonero.
El legado de Bravo Manríquez quedó evidenciado durante la ceremonia, donde se recordó su incansable lucha por mejorar las condiciones de todos los involucrados en la cadena productiva del limón, que representa el 80% de la economía regional. Bajo su administración, se instaló una base militar en el Tianguis Limonero como parte de la Estrategia de Combate a la Extorsión, medida que respondía a sus constantes denuncias públicas sobre el acoso que sufrían los productores por parte de grupos criminales. Su cuerpo fue encontrado esta mañana en un camino hacia Los Tepetates, dentro de una camioneta Toyota gris, mostrando visibles huellas de violencia.
Mientras las autoridades investigan el móvil del crimen, fuentes extraoficiales revelaron la detención de al menos 7 presuntos delincuentes durante un operativo desplegado tras el homicidio, aunque no se ha confirmado si están directamente relacionados con el asesinato. El cuerpo de Bravo fue cubierto con una manta negra y trasladado a Morelia para un velorio privado antes de su sepultura, dejando atrás una comunidad que lo recuerda como el hombre que marcó una huella imborrable en el desarrollo citrícola de Tierra Caliente.
